TESTIMONIO DEL JOVEN RUBÉN CONFIRMADO EL PASADO 21 DE NOVIEMBRE POR NUESTRO OBISPO DON FRANCISCO CASES ANDREU EN NUESTRA PARROQUIA DE AGÜIMES.

CONFIRMADO EN LA FE DE JESÚS, PRINCIPIO Y FIN DE TODO LO CREADO..

Me he educado dentro de una familia religiosa, mis padres desde pequeños nos han hablado de Dios y de la necesidad de amarle y de confiar en él, de esa forma iban alimentando nuestra fe. Una vez que hemos llegado a ser adultos seguían diciéndonos que debíamos ratificar nuestra fe con la confirmación, porque de esa forma seríamos nosotros quienes decidiéramos seguir a Jesús.
    Cuando anunciaron en la Iglesia que iba a empezar la catequesis para la confirmación,  tomé la decisión de asistir a las reuniones, y se lo comenté a mi novia. Ella también se animó y empezamos a asistir a la catequesis. Durante el año que nos estuvo preparando la hermana Pilar con tanto cariño y simpatía, ella nos ayudó a abrir nuestro corazón, aprender a encontrarnos con Dios y a hablar con él mediante la oración.
    Mi novia y yo aprendimos que orar no es simplemente repetir una oración de memoria, sino que es algo más profundo, es abrir tu corazón y expresar sinceramente lo que sientes en lo más profundo del alma. Aprendimos que hay que rezar despacio sintiendo lo que decimos. En cada reunión nos sentíamos muy cómodos y alegres y sentíamos que algo iba cambiando en nuestro interior hasta el punto de querer dar testimonio de nuestra fe y de ser mejores cristianos.
    El día de la confirmación fue algo muy especial para mi novia y para mi. Estábamos nerviosos con deseos de confirmarnos y de recibir la comunión, es una experiencia única que se tiene una vez en la vida. Sientes una alegría interior que te llena de fuerzas para seguir adelante en el buen camino. Yo desde mi experiencia personal animo a todos los jóvenes a que experimenten ese cambio en sus vidas, que sientan esa alegría y paz interior que solo Dios nos puede dar en la confirmación y sobretodo en el momento más importante de la ceremonia que es el momento de la recepción del cuerpo y sangre del Señor en la misa.
Rubén Artiles.